Seguiremos sufriendo cada vez que el precio del petróleo aumente. Este es el destino de cientos de países como Panamá que tienen que ajustar sus economías de acuerdo al comportamiento del crudo a nivel mundial.
Si la semana pasada los dueños de autos tuvieron que tragar amargo, esta semana el trago será más amargo, pues se prevé otro aumento en el precio por galón de gasolina para el día jueves.
Los ajustes al precio del galón de gasolina han sido muy variantes y el caso más notorio ha sido en Panamá Oeste donde se ha visto que el aumento debió situarse dos centésimos por arriba de lo acordado, pero tal aumento ha sido de 12 centésimos, situación que ha irritado a miles de automovilistas de ese sector que a diario recorren cerca de 50 kilómetros entre ida y vuelta, sobre todo aquellos que viven en Arraiján y La Chorerra.
Aunque se sabe que la situación es ajena y se escapa de nuestras manos, es saludable que en definitiva se adopten mecanismos sanos para que las familias no tengan que gastar tanto dinero. Es imperativo que aquellas personas con más de dos autos en casa tengan que usar uno para repartir a sus miembros porque el aumento es insoportable.
Está en manos de las autoridades agilizar los trámites para que el cacareado estudio de la refinería en Puerto Armuelles se cristalice lo más pronto para que experimentar de una vez por todas algún resultado satisfactorio, por lo tanto, a ajustarse de nuevo el cinturón y el bolsillo también.