Una certera puñalada, que se alojó en su anatomía, bastó para terminar con la vida de Carlos Ortega, de 35 años, la madrugada de ayer en Calle 26 El Chorrillo.
El crimen se perpetró frente a conocidos del difunto, quienes informaron a la Policía Nacional sobre el suceso de sangre.
En la tetilla izquierda, a pocos centímetros del corazón, yacía el orificio con arma blanca, dictaminó el galeno.
Por el asesinato, está bajo investigación Rubén Omar Camargo, alias "Zapatón", de 47 años, quien es el principal sospechoso.
Trascendió que la víctima, junto a Camargo, tuvieron una pelea por motivos que sólo ellos saben, dijo la fuente.
Los habitantes de las populosas Calles 26 y 27 El Chorrillo, se levantaban para ir a trabajar, cuando el cuerpo inerte en medio de la intersección de la calle los obligaba a voltear la mirada.
Un amigo de toda la vida de la víctima, en las buenas y las malas, detalló que era una buena persona. Añadió que Carlos no se metía con nadie, incluso, protegía las propiedades ajenas. "Calitín" o "Calito", como era llamado en vida Ortega, se dedicaba a cooperar con los demás ciudadanos. Él le hacía mandados a la gente y ayudaba en lo que podía, dijo un allegado de Carlos.