Dos nuevos sismos, de magnitudes superiores a seis grados Richter, sacudieron la sureña ciudad chilena de Concepción, cuyos habitantes ya habían sido despertados por un temblor de 6,3 grados.
Las nuevas sacudidas de tierra, consideradas también réplicas del terremoto del sábado, alcanzaron magnitudes de 6,8 y 6,6 grados Richter, respectivamente, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.
La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) dijo que el primer temblor alcanzó en Concepción una intensidad de 7 grados en la escala de Mercalli, que va de uno a doce, y de cuatro en la ciudad de Talca.
La energía eléctrica se cortó por algunos minutos en las áreas de la ciudad que cuentan nuevamente con el suministro tras el sismo del sábado y aunque la urbe se encuentra bajo toque de queda hasta el mediodía, muchas personas salieron a las calles presas del nerviosismo, principalmente por la duración del temblor, que se prolongó durante más de un minuto, según radios locales.
ATENCION
El Gobierno ordenó la vacunación contra la hepatitis y el tétano en toda la región afectada por el terremoto y tsunami del 27 de febrero, para prevenir cualquier brote infeccioso.
El subsecretario del Interior, Patricio Rosende, presentó un informe de la situación a siete días de la catástrofe y señaló que la prioridad más inmediata es la vacunación contra la hepatitis y el tétano en todos los servicios de salud de la zona afectada.
"Los servicios de salud están funcionando, incluso con tres hospitales de campaña, y se sumó otro enviado por Brasil, que será instalado en la comuna de Cerro Navia", un suburbio obrero al oeste de Santiago.
CONFUSION
La cifra oficial de fallecidos fue rebajada sustancialmente por el Gobierno cuando se reconoció que hubo informes de duplicación desde las zonas afectadas. El subsecretario entregó una lista con 279 personas fallecidas e identificadas, cuando horas antes se indicaba que los muertos eran 802.
El embajador de Chile en las Naciones Unidas, Heraldo Muñoz, aseguró que se calcula que la reconstrucción "le costará a Chile unos 30,000 millones de dólares".
Mientras tanto, la presidenta Michelle Bachelet y el mandatario electo Sebastián Piñera se reunieron y coincidieron en dejar a un lado sus diferencias políticas y trabajar con "unidad, solidaridad y generosidad", para sacar a Chile adelante.
