Cientos de jóvenes se manifestaban ayer afuera del hotel donde se realiza la reunión en la que se discute un plan para salvar a la urbe de la violencia, a la que asiste el presidente Calderón, otras autoridades y miembros de la sociedad civil.
Los jóvenes, algunos de ellos encapuchados y con pancartas que exigieron la salida del Ejército de Ciudad Juárez, fueron contenidos por decenas de agentes federales que protegen el recinto donde se lleva a cabo la reunión, en la que se leen las conclusiones de las mesas de trabajo instaladas el lunes pasado para examinar la propuesta de Calderón para esta urbe, la más violenta de México.