Una protesta pacífica pero emotiva y llena de dolor, escenificaron más de 30 personas, amigos, familiares y vecinos del taxista Edilberto Jiménez, quien fue brutalmente asesinado hace un mes, sin que aún se capture a su asesino, a quien, aseguran, ven pasearse por el pueblo sin que nadie lo capture. Los quejosos dieron un ultimátum de 8 días, sino cerrarán las calles.