Un grupo de jóvenes góticos dirigidos por adultos serían los responsables de una serie de profanaciones de tumbas en en Cementerio de Penonomé, según señalaron familiares de uno de los difuntos.
La intención de los profanadores serían la celebración de ritos satánicos de iniciación utilizando partes de cadáveres. A esta conclusión llegó la familia Eiseric, que contrató los servicios de un investigador privado para dar con los responsables.
La familia optó por una investigación privada luego de que el 14 de diciembre pasado profanaran la tumba de una de los suyos: la educadora Mirna Altamora de Eiseric, quien había sido enterrada solo 15 días antes.
El cuerpo de la educadora fue sacado de la bóveda por varias personas, que luego le quitaron parte de su ropa y la llevaron hasta el grifo del cementerio, donde la bañaron y la ultrajaron. Se cree que huyeron antes de concluir el rito, y dejaron el cuerpo descubierto en sobre otra tumba.
Agustín Eiseric, hijo de la maestra Mirna, pidió a las autoridades que pongan más vigilancia en este cementerio, ya que solo en el camposanto de Penomomé hay 10 tumbas profanadas.
El cementerio se mantiene custodiado, sobre todo en horas de la noche para evitar que vuelvan los profanadores vuelvan durante la época del carnaval.
Para este año se espera la remodelación del cementerio por más de 200 mil balboas.