Se dice que le lectura de una escritura realizada con sensatez y clara inteligencia instruye, recrea y moraliza. Ella desarrolla la capacidad de crear ideas positivas que contribuyen a nuestro perfeccionamiento moral. Son pocos los conocimientos que se adquieren con la enseñanza y la propia experiencia. Es indispensable, pues, ampliar los conocimientos adquiridos por la eficaz lectura. Conclusión: leer, pero tan solo buenos libros.
Asunto: ¡Madre!, el profesor enseña que no existe Dios. ¿Qué piensa usted de esto? Hijo mío, tu profesor padece de la más desventurada de la ceguera: La duda. ¡Madre!, al exponer mi conferencia mañana, ¿qué debiera decirle? Dile, hijo mío, que no conoce el amor, la caridad, la justicia y la paz.
¡Madre!, ¿el Creador Supremo es Dios?
¡Hijo mío! Dios es la causa misteriosa de cuanto existe, manantial de la vida, consuelo del infortunio, premio del bien, castigo del cruel, riqueza del pobre, fuerza débil, fuente de Derecho, fundamento de la justicia, numen de la Patria, símbolo de la paz, rumbo de las almas, luz que disipa la duda, eterno guía de los pueblos!
¡Madre! El profesor dijo que el matrimonio era una creación de la Iglesia, contraria a la libertas!...!Hijo mío! El matrimonio es la consagración moral de una Ley de la naturaleza. Lo consagró Jesucristo, el sublime libertador de la humanidad.
¡Hijo mío! Al cielo arrebataron nuestros gigantescos padres el blanco y el azul de nuestro pabellón...
Belgrano eligió sus colores; el blanco, símbolo de la pureza; el azul, de paz, de bondad y de justicia... la roja es la bandera del odio, de dudas, de sufrimiento populares, de persecuciones, de incendios, de muerte y de desencantos finales. Aquí nadie pude ni debe usarla...
¡Madre mía! El profesor niega también que exista la Patria... ¿Por qué nombran los gobiernos tales profesores?
¡Hijo mío! Después de Dios, la Patria. He aquí una ley de la naturaleza humana, comprobada por la historia de todos los tiempos y de todos los pueblos, bajo todos los climas. La vida social, hijo mío, tiene por fundamento un triple amor: Dios, Patria y Hogar. Cit. Por E.S. Zaballos, agustino notable. Sentencia: "La duda es la más desventurada de las cegueras".