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UNOS LLORAN, OTROS RíEN
Posible liberación de Pinochet deberá esperar una semana
Agencias
Internacionales
El general chileno Augusto Pinochet ganó una nueva batalla jurídica el lunes contra quienes se oponen a su liberación por motivos de salud, pero una última apelación de Bélgica pospuso sus esperanzas de regresar de inmediato a Chile. La iniciativa belga impedirá que el ex dictador chileno -que comparó los quince meses de saga judicial que ha vivido a una "rueda de la fortuna"- pueda ser repatriado por motivos sanitarios antes de mediados de la próxima semana. La Alta Corte de justicia de Londres rechazó el lunes los recursos presentados por Bélgica y seis organizaciones de derechos humanos, entre ellas Amnistía Internacional, que exigían la publicación del informe médico sobre el estado de salud del general de 84 años y reclamaban un contraperitaje médico. En su sentencia de 37 páginas , el presidente de la Alta Corte, Maurice Kay, estimó que el ministro del Interior británico, Jack Straw, actuó de manera "racional, justa y legal" al rehusar divulgar las conclusiones de los cuatro médicos que examinaron a Pinochet el 5 de enero pasado. También rechazó como "infundadas" las demandas de contraperitajes médicos. Menos de cuatro horas después de conocerse el veredicto, un portavoz de la cancillería belga anunció la decisión de Bruselas de presentar un recurso ante el Tribunal de apelación de la Alta Corte de Londres (Divisional Court). El asunto será tratado en esta instancia el próximo lunes. Como Jack Straw confirmó a través de un vocero que no se pronunciaría sobre el futuro de Pinochet antes de que se agoten los recursos judiciales y que incluso se daba un plazo de reflexión suplementaria de 24 horas para ordenar una eventual liberación, no se espera ningún veredicto definitivo antes del martes. Bélgica es el único de los cuatro países que hicieron demandas de extradición que continúa la batalla para que el ex dirigente de la junta militar, acusado de asesinato y la desaparición de 3.500 oponentes entre 1973 y 1990, sea juzgado. El gobierno de Madrid, al origen del arresto de Pinochet en octubre 1998, tras haber anunciado que respetaría la decisión de Straw no hizo el lunes comentarios sobre el fallo del juez Kay. La Sección Española de Amnistía Internacional (AI) instó este lunes al Gobierno español "a que recurra una eventual decisión final" británica de "paralizar la extradición" del ex dictador a España, según un comunicado de la organización emitido en Madrid. Los responsables de la organización humanitaria en Londres aún no deciden si van a apelar o no. Suiza y Francia lamentaron la interrupción del curso de la justicia, pero no se han comprometido a tomar el relevo. Entretanto en Santiago, detractores y partidarios de Pinochet volvieron a dividirse en manifestaciones de preocupación y júbilo. "Estamos ad-portas del fin de una larga historia", declaró el canciller Juan Gabriel Valdés." Sin duda hay más posibilidades que el senador vitalicio vuelva a Chile", añadió. Tanto el presidente Eduardo Frei como su sucesor, Ricardo Lagos, abogaron por la liberación del ex dictador desde que fue detenido en Londres el 16 de octubre de 1998, cuando el juez español Baltasar Garzón inició gestiones para lograr su extradición. Por su parte, Augusto Pinochet Hiriart, hijo mayor del ex dictador chileno, señaló este lunes a periodistas de radio El Espectador de Uruguay que a su padre "se le cargaron 20 años a la vez", desde que fue detenido en Londres en octubre de 1998, añadiendo en una declaración escrita dada a conocer en Santiago que el posible regreso de Pinochet contribuirá a la reconciliación de Chile. "Si regresa, esperamos que el Gobierno cumpla con su decisión de que Pinochet sea juzgado en Chile", advirtió por su parte, preocupada, la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Viviana Díaz. A su vez en Madrid, la Asociación de Fiscales de España criticó este lunes las "interferencias políticas en las decisiones judiciales" en torno al caso Pinochet, y estimó además que todas las partes representadas en el proceso "deben tener acceso a los informes médicos" sobre el estado de salud del acusado. Diversas asociaciones judiciales españolas reclamaron que se revele el contenido del informe médico de Pinochet, sobre el que Straw basó su determinación de liberar al ex dictador. Por el momento, Pinochet sigue detenido en la lujosa villa de Surrey (oeste de Londres), cerca del aeropuerto militar de Brize-Norton donde le espera desde el sábado pasado un Boeing 707 del ejército chileno, transformado en avión hospital.
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