EDITORIAL
Atentado contra el idioma español
En los años de la década del 40 al 60, la de los "gobiernos oligárquicos", según la expresión popular, el Ministerio de Educación promovió la campaña de contar en balboas, en centésimos y que los locales comerciales tuvieran sus rótulos o marquesinas en español, el idioma oficial de la República. Los últimos gobiernos que se dan golpe de pecho de nacionalistas, el idioma español pareciera estar en decadencia, a juzgar cómo en la televisión ignoran o estropean el idioma de Cervantes. La televisión, un ejemplo, tiene algunos programadores o creativos publicitarios que con pedantería anuncian sus programas en inglés, tratando de impresionar con su dudosa dicción a los televidentes. Pareciera que no tienen conciencia de que ha menguado la comunidad, que habla inglés en el territorio panameño. Gran culpa de esta anomalía la tienen los propios funcionarios públicos, incluso de alta jerarquía, que hablan en dólares y centavos, cuando la moneda nacional es el balboa y la fraccionaria el centésimo de balboa. Si bien es cierto que el dólar es moneda de curso legal y forzoso, ya que Panamá no imprime papel moneda, por respeto a nuestra identidad debemos promover los términos que señala la Constitución Política. El Ministerio de Educación debe dejar su apatía y recordarle a los medios de comunicación sobre el uso del idioma español o castellano en sus transmisiones. Así mismo, el Ministerio de Comercio e Industrias debe llamarle la atención a los almacenes que tienen por razón social las franquicias de las transnacionales comerciales y que han desplazado al español de sus marquesinas. Contrasta el hecho de que con los "gobiernos nacionalista" tengamos una débil identidad nacional. Por eso es deber de las autoridades reiniciar una campaña para que los panameños nos identifiquemos con nuestras cosas y dejar a un lado el prejuicio de que el idioma sajón es mejor, un complejo que los panameños colonizados mentalmente, no se les quita y son nostálgicos del sometimiento y la tutela extranjera. En las escuelas debe insistirse en este aspecto, porque son los docentes los llamados a profundizar sobre los temas nacionales. Así como hemos hecho campaña para erradicar el Halloween que se estaba promocionando más que las fiestas patrias, así mismo debemos redoblar esfuerzos para que los panameños sintamos orgullo del idioma español que es nuestra lengua oficial. Evitemos que por prejuicios y complejos la lengua Shakespeare reemplace a la del "Manco de Lepanto", Miguel De Cervantes Saavedra.
PUNTO CRITICO |
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