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POR DOS MINUTOS
"Apagón contra la violencia" hoy domingo
Bogotá
AFP
Los colombianos apagarán en la noche de este domingo, durante dos minutos, las luces de sus viviendas y aparatos eléctricos, en una protesta simbólica contra la creciente violencia guerrillera y paramilitar, informaron el sábado los organizadores de la manifestación. Con ese "apagón por la paz" se busca expresar el rechazo a los ataques de la guerrilla contra la infraestructura energética del país, las matanzas perpetradas por los rebeldes y los paramilitares de extrema derecha, la utilización de niños en la guerra y otros graves atropellos contra los civiles no combatientes, señalaron líderes humanitarios. "La sociedad civil tiene que decir 'basta de barbarie y terrorismo'", dijeron voceros de la entidad humanitaria privada "No más", que surgió hace tres años para promover la lucha contra el secuestro. Los rebeldes del Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista) han desatado una campaña dinamitera contra las torres de alta tensión del departamento de Antioquia, causando un drástico racionamiento de energía en la industrial ciudad de Medellín, la segunda del país con más de 2 millones de habitantes, y otras localidades del noroeste del país. Esos atentados han causado pérdidas por unos 100 millones de dólares, según el Gobierno. La guerrilla del ELN, la segunda de Colombia, ha derribado en el último año más de 160 torres de alta tensión en Antioquia para expresar su rechazo a la privatización de las empresas del sector eléctrico, según la jefatura rebelde. El Gobierno del presidente colombiano, Andrés Pastrana, tiene previsto vender la generadora de energía Isagen en el primer trimestre de este año y la comercializadora Isa, la más grande del país, en el segundo trimestre, así como otras empresas del sector minero, para obtener unos 2 mil millones de dólares que permitan cubrir el agujero fiscal. La venta de Isa e Isagen hace parte de un acuerdo suscrito por Bogotá con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que exige sanear las finanzas públicas y adoptar otras medidas de ajuste, recordaron los comentaristas. Según fuentes oficiales y analistas, el 43% de los recursos que necesita el Gobierno para financiar el déficit deberán provenir de las privatizaciones. Las autoridades también han anunciado que no se descarta un alza de las tarifas para cubrir los daños provocados por los rebeldes, lo que es rechazado por los sindicalistas y algunos obispos católicos. El ministro colombiano de Minas y Energía, Carlos Caballero, señaló el viernes que se mantendrá el plan de privatizaciones, a pesar de la campaña dinamitera desatada por el ELN.
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