Su escogencia fue unánime. Tuvo la capacidad de unir a una tuna que en años anteriores había protagonizado varias disputas tras presentarse dos reinas.
Adriana Mata es la soberana de los carnavales de Calle Arriba de Las Tablas 2006, y sobre los problemas presentados en otros tiempo dice que "se está tratando, desde hace varios años poner, orden en la sociedad de Calle Arriba y hoy día existe un reglamento de reina que debe ser respetado y cumplido por todas las chicas que deseamos ceñir la corona de tan prestigiosa tuna".
UN LEGADO DE REINAS
Adriana no es la primera reina en su familia. Cuenta que su tía, Fátima Zelaya, fue reina de Calle Arriba de Las Tablas en 1974. "Durante su carnaval, ella fue la única reina que tuvo el pueblo, ya que en ese año la tuna contraria no tuvo soberana".
Afirma que, su tía Fátima la ha apoyado mucho y le ha ayudado a enfrentar lo que Adriana considera como un "hermoso reto" con mucho amor y pasión por su distinguida Calle Arriba.
LA ESCOGENCIA
"Cuando mi querido amigo y diseñador, Horacio Prado, me propuso la idea de ser reina, me quedé súper sorprendida (fascinada), ya que me encanta el mundo del modelaje y de los concursos de belleza".
Sin embargo, el ser reina de la tuna de Calle Arriba, representa para ella una responsabilidad mucho mayor. Se sintió sumamente emocionada y elogiada, más aún cuando toda la tuna la apoyó y unánimemente la ratificaron como soberana para el 2006 en Asamblea General de socios; convirtiéndose en la segunda reina de su familia.
SU INFANCIA
"Es algo inolvidable". Asegura que siempre la recordará como una linda etapa en su vida, pues estuvo rodeada por todas sus tías y por su hermana mayor. Irene del Rosario Zelaya de Mata y René Mata, son los padres de Adriana. Ana Raquel y Michelle Mata Zelaya son sus hermanas.
"Provengo de una familia de mucha tradición, así que desde niña viví entre polleras, reinas y sabor a carnaval. Mi familia materna es de Las Tablas y tienen una larga trayectoria en Calle Arriba.
Sin embargo, Adriana nació y creció en la ciudad de Panamá, pero constantemente viajaban a Las Tablas; sobre todo en Semana Santa, las fiestas de Santa Librada en julio, Año Nuevo y carnavales.
UNA LECCION
Una gran lección que considera que ha aprendido es el ser una de las soberanas de Las Tablas. "Sin duda alguna, el ser reina me ha permitido conocer a muchas personas de diferentes razas y estratos sociales y he aprendido que cada persona es importante y tiene un gran valor, por lo que nadie debe subestimar a otro, pues todos los seres humanos tenemos grandes recursos para dar.
