Viven entre excrementos, basura y ratas. En pleno siglo XXI y en el centro de la ciudad capital existe un grupo de 72 familias que sufren la consecuencias de un sistema de alcantarillado colapsado.
En el viejo inmueble condenado No. 57 en la calle 15 del corregimiento de Pueblo Nuevo, hay quienes piden auxilio a las autoridades y quieren acabar con el panorama de inmundicia en que conviven.
No es de justicia social tener contacto directo con las aguas negras en los pasillos, baños y otras áreas. Adicionalmente la vieja vivienda representa una "trampa de muerte" por las condiciones físicas del inmueble.
El tiempo se encargó de provocar el daño en la cañería, pero también hay responsabilidad directa de inquilinos, quienes no han dado buen uso al sistema vertiendo basura, papel, toallas sanitarias y cuanta cosa se le ocurra.
Jorge Enrique Macías, líder comunitario, planteó que este problema en las tuberías de aguas negras lo sufren desde hace mucho tiempo.
El vocero afirmó que también se necesita la concienciación de los vecinos para mantener la limpieza y unidos lograr respuestas a este problema comunitario.
Indicó que llamaron al IDAAN para que le repararan el daño, sin embargo nunca nos atendieron .
"Tuvimos que acudir a la Junta Comunal para que nos ayudaran", apuntó.
Por otro lado, Carlos Lee, representante de corregimiento del sector, señaló que procedieron a destapar las tuberías y con un equipo del Cuerpo de Bomberos de Panamá procedieron a limpiar el área contaminada mediante un sistema de presión de agua.
VECINOS DEBEN ORGANIZARSE
Carlos Lee, representante de Pueblo Nuevo, invitó a los vecinos del inmueble a conformar una junta directiva, a fin de lograr respuestas para mejorar su calidad de vida. Reveló que para el mes de marzo iniciarán trabajos menores de rehabilitación en las seis casas condenadas que hay en el sector. Cuenta con un presupuesto de B/.10 mil.