Una coalición de grupos de defensa del medio ambiente pidió a un juez federal que ordene la interrupción de las pruebas de un controvertido sistema de sondas de ultrasonido que podría causar daños a las ballenas.
El juez de San Francisco (California) Samuel Conti ya ordenó el año pasado la interrupción de estas pruebas, pero la compañía fabricante del sistema, Scientific Solutions, volvió a emprenderlas el mes pasado tras obtener un permiso del Servicio de Pesca de EEUU.
La coalición de grupos de defensa del medio ambiente -entre los que se encuentran Australianos por los Animales y Santuario de los Mares- argumenta que el sonar podría confundir a las ballenas migratorias y separar a las crías de sus madres.
Por su parte, Scientific Solutions asegura que el sistema, que se ha venido probando en la costa central de California, es seguro y servirá para proteger a estos mamíferos, ya que impedirá que se choquen contra los barcos.
Los ecologistas llevaron el asunto a los tribunales hace más de un año bajo el argumento de que el proyecto debería haber sido objeto de una evaluación medioambiental antes de ponerse en marcha.
El juez dio la razón a estos grupos y ordenó la interrupción de las pruebas hasta que la compañía no obtuviese el certificado correspondiente. |