El paradisíaco Parque acuático Edén se ha convertido en un encantador lugar para recreación.
Situado a 20 minutos de la ciudad capital, acogedor y placentero, al aire libre, lo más curioso de este precioso sitio es que está a orillas de la vía Interamericana en el corregimiento de Cerro Silvestre, distrito de Arraiján.
Con excelente comunicación en autobús para las épocas de estación seca desde que entra enero. Coincidentemente con el período de vacaciones escolares, chicos y grandes en familia disfrutan del parque, el paseo es divertido y muy entretenido.
No hay que ir muy lejos para disfrutar de un sitio agradable, las instalaciones se asemejan a una arquitectura, de aquellos lugares turísticos muy visitado por propios y extraños, casi un escenario fuera de nuestras fronteras.
HORARIO
Abierta a todo público, en un horario de 8: 00 de la mañana hasta las 5: 00 de la tarde, sus instalaciones con amplio abanico de atracciones acuáticas, áreas verdes árboles frondosos, servicios de atención hasta se construye un restaurante.
SANO ESPARCIMIENTO
El entorno paradisíaco rodeado de vegetación accesible completo y divertido, disponible para pasar un magnífico día en familia, amistades hermanos en Cristo, compañeros de trabajos y parejas de novios que se divierten en sano esparcimiento.
El pastor de la congregación Bautista, Pablo Penna, es el creador de este monumento, quien compartió con nosotros cómo surgió la idea de desarrollar un proyecto de esta naturaleza.
Resaltó que se interesó en abrir el parque porque precisamente Arraiján no tenía un lugar turístico con estas características de diversión para el entretenimiento de chicos y grandes.
Las piscinas, los más grandes atractivos de diversión para el público, están edificadas con dimensiones para niños de tres a cinco años, de seis a nueve y de proporciones más amplia para toda la familia.
El precio es lo de menos, se le cobra una tarifa accesible de B/.1.50 a niños de tres a doce años, y para los adultos B/.2.50. Además, se ofrece clases de natación, los seminarios tienen un precio módico de 50 dólares, el interesado no deja de asistir a las clases hasta que aprenda a nadar.
La piscina cumple con todas las normas nacionales e internacionales, dos instructores de natación o salvavidas que permanecen atentos durante todo el día para salvaguardar la vida y seguridad de los bañistas.
El seguidor de Cristo nos confiesa que el lugar se prohíbe la venta y consumo de bebidas alcohólicas, cigarrillos o cualquier otra sustancia prohibida, se promueve el deporte con bases sólidas en los valores éticos y morales.
Además, cuenta con tres toboganes o deslizadores, de 90 centímetros de ancho y 30 pies de altura, 150 metros de áreas de techado, 9 paraguas, 5 ranchitos, gradas, vestidores y baños para que las personas gocen de una ducha antes de entrar y al salir de la piscina.
El propietario asegura que las instalaciones acuáticas tienen facilidades para el visitante.