Dentro de poco se estarán celebrando las asambleas ordinarias de las cooperativas, que según el artículo 37 de la Ley No. 17, de mayo de 1997, deben realizarse dentro de los tres meses siguientes al cierre del ejercicio socio económico.Eso significa que al término de marzo, todas las cooperativas deben haber realizado la asamblea correspondiente, en las que uno de los principales temas a tratar es el de la elección de nuevos directivos.
La aludida Ley, en su artículo 41 señala que, "cuando el número de asociados fuera superior a doscientos, o éstos residieran en lugares distantes, la asamblea podrá ser constituida por delegados elegidos conforme al procedimiento previsto en el estatuto".
Señala igualmente el artículo en mención que, "cuando la cooperativa tenga más de dos mil quinientos asociados, la asamblea se efectuará por delegados".
En relación al escogimiento de los delegados y las modalidades que presentan algunas cooperativas es a lo que queremos referirnos en esta ocasión.
Por lo general se nombra un Comité de Elecciones que determina quienes pueden ser candidatizados para delegados, poniendo como razón principal el que estén a paz y salvo con los deberes económicos que tienen con su cooperativa. Eso está muy bien!
Lo que no está bien es que en unos casos el Comité determina que no se puede ser delegado si el asociado ha faltado a un número de reuniones, y precisamente, casi siempre, cae el reglamento en aquellos asociados "polémicos", que todo lo cuestionan y que es contraproducente tenerlos en un cargo directivo.
Pero lo peor es que algunas cooperativas ponen como condición para ser delegado el llegar temprano el día de las elecciones. Si por ejemplo, deben escogerse cien delegados, a los primeros cien los gratifican con cinco o más balboas y quedan como delegados.
Es decir, en unos casos castigan a quienes preocupados por el rumbo de la cooperativa están pendientes de que no se incurra en violaciones a la Ley y en otros, no importa cual sea su comportamiento como cooperativista. Se gana un dinero por llegar temprano y tiene el derecho de participar en alguna rifa de incentivos.
Sería conveniente que el IPACOOP revisara esos reglamentos y expidiera uno que todas las cooperativas debieran cumplir.
Pero vamos a otro tema. Sólo la experiencia nos enseña lo que para otros es una resignación, porque deben estar cansados de gritar su desdicha, sin que los escuchen.
Conseguir una ambulancia en el Sector Oeste, que es por donde vivo, por supuesto, es más difícil que ganarse el gordito.
Si usted tiene un pariente encamado, que no puede caminar, pero que tiene que ir a una cita médica en la clínica especializada del Seguro Social, vea como se las arregla, porque lo de la ambulancia... ni con milagritos. Volveremos sobre el tema.