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En los últimos meses se han dado varios secuestros y en la vía pública. A veces, no se vuelve a ver a la víctima. Foto dramatizada  |
Teodolinda de González y Eladio González, esposa y hermano de Adán González, secuestrado en la Vía al Mar el viernes 28 de diciembre, en Barranquilla - Colombia, viajaron hacia ese país, el viernes, para saber noticias, y tenían previsto reunirse con el Cónsul de Panamá en esa ciudad Abel Antonio Barrios Nieto, según se pudo conocer por familiares y vecinos.
Sin embargo, en declaraciones de la esposa de Adán González Otero publicadas por diario "El Heraldo" de Barranquilla, revela los últimos minutos que conversó con su esposo antes de ser secuestrado.
Teodolinda, quien estaba un poco consternada por lo que le estaba pasando, pedía entre lágrimas y sollozos "despertar de esta pesadilla", al tiempo que clamaba por la liberación de su esposo.
A las doce del día del viernes 28 de diciembre, Adán González Otero se comunicó telefónicamente con su esposa, Teodolinda, en Ciudad de Panamá. Le dijo que salía en un taxi expreso para Cartagena donde después de reunirse con un cliente abordaría un avión para su país para al anochecer estar en casa. También le pidió que lo fuera a recibir al aeropuerto. Ella intentó comentarle las novedades ocurridas en su ausencia pero él la interrumpió con un contundente "allá me cuentas".
Desde ese momento, Teodolinda de González no oye la voz del padre de sus dos hijos. Extrañada por la no presencia de su esposo en el vuelo que partió de Cartagena a Ciudad de Panamá, a la mañana siguiente se comunicó con el hotel donde se hospedó su marido desde su llegada a Barranquilla el 26 de diciembre, y el encargado le informó la noticia que ese día aparecía en las primeras páginas de los diarios locales: "Secuestrado panameño en puente de la 46 con Circunvalar".
Teodolinda, su cuñado, Eladio González, y un Capitán de la Policía de Panamá, arribaron ayer a Barranquilla con la esperanza de que los captores se comuniquen con el interés de despertar la atención en su caso. "Esta guerra no es nuestra. No sabemos si lo tiene la guerrilla, los paramilitares o la delincuencia común. Tampoco nos importa. Lo único que queremos es que nos devuelvan a Adán para marcharnos y no regresar", dice la mujer mientras estalla en llanto en las oficinas del Consulado de Panamá.
VENDEDOR
Adán González Otero, 35 años, es un vendedor de una empresa de zapatos deportivos, que viaja frecuentemente a Barranquilla y a otras ciudades del país para distribuir su producto en los almacenes. "No es un empresario ni un comerciante. Es un hombre a quien el salario apenas le alcanza para pagar los servicios y mantener un hogar con mujer y dos hijos", sostiene la esposa.
Las autoridades tuvieron conocimiento del secuestro de González cuando el taxista que lo transportaba denunció que hombres armados a bordo de un automóvil blanco lo interceptaron en la autopista al mar y se llevaron a su pasajero. Ese fue el segundo plagio cometido en esa vía en menos de un mes tras el caso de la comerciante Marta Elena Caraballo, tomada cautiva cuando trotaba en compañía de su esposo.
A ocho días del secuestro, las autoridades no manejan muchas pistas sobre el paradero del extranjero ni de las personas que lo mantienen en su poder. "Que se comuniquen con nosotros es lo primero que pedimos", manifiesta el hermano de la víctima.
ACABAR CON INCERTIDUMBRE
A diferencia de su cuñada, Eladio González permanece imperturbable y explica que para él sería muy doloroso aceptar la muerte de su hermano pero ésa es una de las posibilidades dada la situación de Colombia. "La incertidumbre nos está matando a nosotros. Quiero que me lo entreguen, que me digan dónde está para ir a buscarlo, bien sea vivo o muerto".
Pero Teodolinda no se resigna a perder al hombre con quien ha compartido trece años de su vida y silencia a su cuñado con una nueva explosión de llanto que hace bajar la cabeza del oficial que los acompaña y eriza a quienes escuchan su historia en las oficinas del Consulado: "¡No...Esto no está pasando...Esto es una pesadilla y pronto voy a despertar!". |