Quien no goza de creatividad, quizás haga poco en la cama, lo que resulta bastante rutinario.
Recuerda que el sexo es como una planta a la que se le debe regar todos los días, sobre todo cuando se trata de la entrega íntima.
La fantasía sexual es una especie de ensoñación que permite a la persona imaginar situaciones sexuales que nunca va a vivir o que le gustaría llevar a cabo en algún momento de su vida. Generalmente producen placer y deseo sexual y se suele recurrir a ellas para aumentar la excitación antes o durante las relaciones sexuales.
SON MAS QUE DESEO
Las fantasías son exclusivas de cada persona y producto de su imaginación. Esto garantiza la privacidad de sus contenidos, facilita asumir roles determinados y realizar o desear conductas que probablemente nunca se llevarían a cabo en la realidad.
Muchas personas creen que las fantasías expresan un deseo real de participar o experimentar una situación dada, pero lo cierto es que la mayoría de la gente no siente el deseo ni la necesidad de representarlas en su vida cotidiana. La mayoría de las fantasías sexuales se centran en situaciones ideales o que nunca han sido probadas en la vida real.
Aunque cada fantasía es diferente y puede cambiar de un momento a otro, existen temáticas que se repiten, con una gran variedad de matices en cada persona: mantener relaciones en grupo, con una persona diferente a la pareja, con una persona del mismo sexo, con algún famoso, en un lugar insólito, en fin.