SUCESOS


�Hay seguridad en las tarjetas?

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Omar Wong Wood
Cr�tica en L�nea

Las denuncias de estafas electrónicas y delitos relacionados con el uso indebido de tarjetas de crédito, disminuyeron durante los primeros seis meses del años 2003 con relación al años pasado, según informes de la División de Delitos Contra la Fe Pública de la Policía Técnica Judicial (PTJ), pero, las organizaciones criminales dedicadas al ilícito, se tecnifican más.

Según fuentes de la entidad investigadora, durante los seis primeros meses del 2003 se han reportado un total de 20 denuncias, sin embargo, en el mismo periodo del 2002 fueron presentadas un promedio de 35.

La tarjeta de crédito es un instrumento crediticio nominativo, es un medio de pago, mediante el cual el titular dispone de un margen de crédito asegurado por una institución financiera, pero su uso se ha generalizado a tal punto que se ha convertido en una fuente de ingresos para organizaciones criminales, que se aprovechan del descuido del titular que poco caso hace a las normas elementales medidas de seguridad, quedando abierta una puerta para fraude.

De acuerdo con informes de la Sección de Uso Indebido de Tarjeta de Crédito de la PTJ, éste delito se intensificó a partir de 1990. Desde ese momento se habilitan en Panamá bandas organizadas dedicadas a este delito.

Según los reportes de la Sección de Uso Indebido de Tarjeta de Crédito, existen varias modalidades de estafa, una de ellas consiste en la obtención del número clave "PIN" para luego introducirlas en tarjetas falsificadas, con previo conocimiento del número y banco de la tarjeta.

Otro método, es el robo de las tarjetas de crédito que de inmediato son usadas por los victimarios para sacar importantes cantidades de dinero y la compra de artículos en comercios. Esta modalidad disminuyó debido a las exigencias cada vez más rígidas en los comercios, en cuanto a la verificación de identidad.

Para este tipo de modalidad algunas organizaciones criminales crearon bandas de carteristas se dedican a perpetrar asaltos con la única intención de tener acceso a tarjetas de crédito y los documentos de identidad de las personas para ejecutar compras en el comercio.

Las organizaciones criminales utilizan otras modalidades, una de ellas es, la paciencia. Los miembros se establecen en el perímetro de un cajero automático, escogen a su víctima. Debe ser una persona con poco conocimiento en el trámite de retirar dinero de los cajeros. Llega un momento en que la posible víctima solicita ayuda. En ese momento el delincuente, "cual buen samaritano" entra en acción y tiene acceso a la información del número clave de la tarjeta, con la que puede copiar la Tarjeta o clonarla.

Otra faceta aprovechada por los delincuentes, se ha dado en pocos casos. Una vez obtenido el dinero, algunos usuarios de los cajeros, no esperan que el sistema de la computadora se cierre, por el contrario abandonan el lugar y es en ese momento que los delincuentes aprovechan para accesar al sistema con la información anterior.

Las víctimas de estas bandas se dan cuenta del uso indebido de sus tarjetas cuando acuden al banco y se percatan de sus estados de cuenta y entonces presentan la denuncia ante la PTJ.

Una de las estafas con tarjetas de crédito más frecuentes en la década de los 1990 fue la "tarjeta trabada". Aún se presentan caso pero en menor escala.

�Cómo hacen esto los delincuentes? Muy fácil. Las víctimas llega al cajero automático, mete su tarjeta en la máquina, y esta queda trabada. Porqué?. Por que un delincuente entró con anticipación y colocó una cinta para retener la tarjeta, de manera que no caiga y quede suspendida. Esta situación es aprovechada por los delincuentes. Uno de ellos, le pregunta a la persona en el cubículo, cual es el problema y se ofrece a ayudarlo. Le indica que le ha ocurrido lo mismo en tres o cuatro ocasiones y que para solucionarlo debe marcar el número de "PIN" en cuatro ocasiones.

La persona no ve resultado y piensa que la máquina se comidió la tarjeta y se retira con la seguridad de que podrá retirar el plástico al día siguiente en el banco.

Esta modalidad de estafa es fue originada en venezolana en 1995, y llegó a Panamá en 1998, según la PTJ.

Otra forma de obtener dinero de las tarjetas de crédito de manera ilícita y más violenta en el denominado "secuestro express"

En este tipo de modalidad la víctima es privada de su libertad, por los delincuentes, quienes le exigen que saque todo el dinero de la tarjeta de crédito o de débito. Para ello, a la víctima le quitan la cartera, sacan la tarjeta y se la llevan amenazada al cajero para sacar el efectivo.

En estos casos, la víctima es observada para saber si tiene tarjeta de crédito con fondos altos, como las "tarjetas doradas.

Las leyes y controles han aumentado, pero los delincuentes no dejan de idear nuevas formar y maneras de cometer sus fechorías. La red de servicios de tarjetas de crédito Visa International mira con recelo el servicio por internet debido a los constantes fraudes que se cometen por esa vía, según EFE.

 

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