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Transportistas preparan barricadas en las calles de Managua lo que hace escasas las esperanza de ver el final a esta ola de violencia que ha reinado en la ciudad desde hace ocho días. |
El gobierno de Nicaragua propuso una tarifa para el transporte colectivo de Managua superior a los 15 centavos de dólar, pero inferior a los 22 centavos de dólar en un intento por abrir negociaciones destinadas a resolver la huelga total de autobuses.
Con la mediación de directivos de la Cámara Nacional de Comercio, los líderes de la huelga, que ya cumple siete días, aceptaron estudiar la oferta con los presidentes de las cooperativas del transporte que respaldan el paro.
Era posible que anoche los dirigentes del transporte iniciaran las negociaciones en la sede de la Cámara de Comercio con el ministro nicarag�ense de Transporte e Infraestructura, Edgard Bohórquez, y el alcalde de Managua, el sandinista Hearty Lewites.
Los dueños de los 1.200 autobuses que prestan servicio en Managua iniciaron el paro total de sus unidades el miércoles pasado para demandar un alza en el pasaje de 15 a 22 centavos de dólar.
El ministerio del Transporte y la alcaldía se han opuesto al alza con el argumento de que los dueños de autobuses obtienen unas ganancias que están de acuerdo con el pésimo servicio que prestan en Managua.
Los estudiantes universitarios, que rechazan todo aumento en el precio del pasaje y demandan que quede en 2 córdobas (15 centavos de dólar), ya se han enfrentado a la policía en su lucha por impedir cualquier alza.
El máximo dirigente de los huelguistas, el sandinista Rafael Quinto, confirmó que con sus compañeros de lucha está analizando una serie de alternativas que propone el gobierno.
Los transportistas que cumplieron ayer, un paro del servicio de autobuses de ocho días en Managua, rechazaron una propuesta para aumentar la tarifa en un 12,5 por ciento y piden una respuesta del presidente de Nicaragua, Arnoldo Alemán.
Mientras que las universidades Nacional Autónoma de Nicaragua y de Ingeniería anunciaron ayer la suspensión de las clases, mientras la Universidad Centroamericana, de jesuitas, cerró el curso nocturno, y otras altas casas de estudio privadas analizan si paralizan el curso. |