La pobreza en muchos casos obliga a los niños, niñas y adolescentes de nuestro país a trabajar para llevar un sustento a su hogar.
Jenifer Rodríguez, es una joven que desde los 12 años comenzó a trabajar como doméstica para ayudar a satisfacer las necesidades apremiantes de su familia.
En la mayoría de los casos los niños que trabajan abandonan sus estudios. Este fue el caso de Jenifer, que afortunadamente fue referida a Casa Esperanza y los retomó. Actualmente a sus 16 años cursa cuarto año de secundaria.
ACCIONES
El Ministerio de Trabajo y Desarrollo Social esta realizando inspecciones en áreas de cafetales para detectar la presencia de niños trabajando y llamar la atención de los empresarios para abolir este tipo de actividades, según indicó el titular de esta cartera, Reynaldo Rivera.
Por su parte, la ministra de la Juventud, La Mujer, La Niñez y la Familia, Leonor Calderón, advirtió que están trabajando en las campañas de divulgación en conjunto con organizaciones de la sociedad civil, como es el caso de Casa Esperanza.
"Tenemos una alianza con los municipios de Panamá, La Chorrera y Santiago, donde capacitamos a los padres de familia de los niños que están acudiendo a los vertederos de estas ciudades para explicarles el riesgo que representa la presencia de menores en estos lugares", agregó.
Calderón destacó que todo niño en la calle esta vinculado a una actividad laboral con riesgo y esta totalmente comprobado que lo que llevan es mínimo y no resuelve la situación de pobreza de las familias, poniendo en riesgo su integridad física y mental, a parte que compromete seriamente sus posibilidades de desarrollo.
SANCIONES
Calderón resaltó que a pesar de que el código de la familia prevé sanciones para los padres de los niños que trabajan esto es muy difícil de implementar, porque en la mayoría de los casos los padres no cuentan con los recursos para para ningún tipo de multa.
"Los niños que recogemos en las calles los llevamos a su hogar y conversamos con sus familiares y citamos a los padres al ministerio, sin embargo se observa un alto grado de reincidencia", agregó.
Según Calderón no se deben privara a los niños de la presencia de sus padres, por lo que considera que la mejor solución es educarlos para que ellos se hagan cargo de la integridad de sus niños.
La representante en Panamá de la Oficina Internacional del Trabajo, Vielka Bolaños informó que pronto se instalará el Cómite de Erradicación de Trabajo Infantil y esta dirección formará parte de un decreto presidencial.
"Este cómite tendrá más alcance que otras instituciones que trabajan para erradicar el trabajo infantil y contará con mayor cantidad de actores, incluyendo organismos gubernamentales y a la sociedad civil.
COSTUMBRES
La ex primera dama de la República, Dora Boyd de Pérez Balladares, indicó que en la mayoría de los casos, los niños que trabajan en los campos es por costumbres de sus familiares.
"A los niños le enseñan por costumbre a que trabajen en la época del verano para ganarse unos realitos y para que sean trabajadores. En muchas ocasiones no se esta explotando al menor, sino que son costumbres ancestrales", apuntó.
Referente a los empacadores de los supermercados, Boyd enfatizó que durante su administración se llegó a un acuerdo con los dueños de estos establecimientos para que le dieran cierta protección a los niños que trabajaban allí.
Roxana Méndez, directora ejecutiva de Casa Esperanza, acotó que la situación es grave porque las estadísticas muestran que cada tres de diez niños de nuestro país están en situación de pobreza y dos de ellos se avocan a trabajar desde edades tempranas y la mitad de este grupo abandona las escuelas.
"El impacto que tiene el trabajo infantil se ve en la falta de educación y si estos niños no tienen educación o aspiraciones, la situación de nuestras generaciones futuras será precaria", puntualizó.
Esta en las manos de todos cooperar para ponerle un alto al trabajo infantil.