Este año los mártires no estuvieron solos

Redacción
Crítica en Línea

Esta década ha sido la del olvido. Los mártires de enero y los caídos durante la invasión estadounidense de 1989 cayeron en el baúl de la desmemoria, y se fueron quedando.

No obstante, este año los héroes enerinos tuvieron un poco más de suerte y las multitudes se lanzaron a las calles a rendirles tributo y a llorar por sus recuerdos. Los del 20 de diciembre siguen gravitando en la indiferencia del panameño común. Enero de 1999 es un mes especial, y ayer quedó demostrado

La multitud se reunió en el teatro balboa para agitar banderas y rendir tributo a los mártires. Algunos fueron llevados porque el candidato oficial estaba ahí.

El hijo de Genaro López (expulsado del Instituto Nacional por rebelde) estuvo en los actos y la romería. Dijo que el movimiento estudiantil estará vigilante para que se cumplan los tratados.

Algunos manifestantes llegaron al extremo de arrastrar por las calles citadinas la enseña estadounidense. El repudio del panameño es generalizado.

Los mártires querían hacer ondear la bandera panameña en la zona del canal. La madre de Ascanio cumplió ese propósito ayer: sembró una en los jardines del edificio de la Administración del Canal de Panamá.

 

 

 

 

 

 

 

"La sangre derramada jamás será olvidada" reza el letrero de aerosol. ¡Qué ironía! Hoy, por ser un día especial, se recordó a los caídos en 1964.

 

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