"No me siento presa por estar dentro de cuatro paredes, la libertad es espiritual", sentenció Argelis Pinzón interna del Centro Femenino de Rehabilitación.
Ayer, las internas celebraron las fiestas de fin de año en medio de la presencia de la Defensora del Pueblo, Mónica Pérez, quien realizó un recorrido por las instalaciones del penal.
Durante la mañana se realizó un acto que inició con una misa y terminó con un acto cultural en donde las internas demostraron sus destrezas artísticas representando una obra de teatro sobre el Nacimiento del Niño Jesús.
En medio de los cantos, las reclusas lloraron por la emotividad que les trajo el mensaje de la ocasión y al mismo tiempo sentirse alejadas de sus seres queridos, quienes las esperaban afuera para cumplir con el reglamento de visitas.
Las presas pidieron mejores infraestructuras sobre todo en el área de la cocina y los baños.
Pidieron a la Defensora del Pueblo que interceda para que se cumpla la ley de manera imparcial para recibir los beneficios de los indultos, los cuales aparentemente se otorgan con privilegios, según las reclusas.