Un jubilado brasileño de 71 años fue arrestado el viernes pasado después de que la policía descubriera que, para vengar a su esposa que murió víctima de un error médico, encomendó a varios pistoleros el asesinato del galeno.
El jubilado Osvaldo Martins reconoció, en entrevistas publicadas hoy por la prensa, que encargó el asesinato del médico Mauricio Nunes, y dijo que la muerte del profesional palió en parte el dolor que siente por la desaparición de su esposa.
Martins relató que su esposa se fracturó un fémur en un accidente doméstico el año pasado y que el médico que la atendió aplazó en cinco oportunidades una operación a la que debía ser sometida con urgencia.
Dijo que su mujer estuvo internada 60 días en la clínica de Nunes mientras esperaba la operación y que su estado se fue agravando lentamente, hasta que murió por insuficiencia renal y respiratoria en octubre de 2002.
El jubilado, entonces, decidió contratar a un grupo de pistoleros para vengar la muerte de su esposa, con la que vivió 44 años, y ejecutar al médico al que responsabiliza por la tragedia que lo privó de su "único tesoro". |