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Guerrilla colombiana celebra la Navidad
Agencias
Internacionales
Lejos de las balas y las bombas, en medio de la cuenca amazónica, brillan las luces de colores, los arbolitos y los adornos navideños. Los pobladores locales y los guerrilleros se preparan para celebrar la Navidad. A pesar de una ofensiva prenavideña lanzada por la guerrilla, se vive un ambiente de paz en la zona de distensión, un área de 42.000 kilómetros cuadrados en el suroeste de Colombia desmilitarizada por el gobierno para facilitar negociaciones de paz. Los habitantes locales conviven forzosamente con centenares de guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), instalados aquí desde hace más de un año para las negociaciones. Muchos guerrilleros se declaran ateos y comunistas, pero otros son campesinos que no olvidan su formación religiosa católica y consideran la Navidad una fecha especial. Iván Ríos, coordinador del comité de las FARC encargado de examinar la agenda de las negociaciones de paz, dijo que durante sus 16 años en la guerrilla nunca ha dejado de celebrar la Navidad. "En las FARC respetamos las tradiciones de nuestro pueblo y celebramos la Navidad porque sabemos que es una fecha especial del calendario", manifestó Ríos a la AP. Algunos rebeldes se hallan entusiasmados por celebrar la Navidad en un poblado y no en el monte. "Esta será la primera vez que vamos a celebrar la Navidad en un pueblo", afirmó Nohora, una joven combatiente de las FARC. Otros enfatizaron que su lucha no es religiosa y que respetan las creencias de todos los colombianos. "Nuestra lucha no es por un problema religioso, sino por un problema social", dijo Joaquín Gómez, uno de los tres negociadores de las FARC. "El católico, el evangélico, el ateo están padeciendo hambre". Jairo Martínez, uno de los comandantes de las FARC que ha pasado 24 de sus 47 años en la guerrilla, se expresó preocupado porque muchos niños en Colombia no recibirán regalos porque sus padres son muy pobres.
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