Si alguien tenía alguna duda de que la situación de inseguridad en el país es una verdadera crisis, solo tiene que repasar lo sucedido esta semana: Ayer en San Pedro, desconocidos hicieron más de 10 disparos contra un automóvil del SPI, conducido por un escolta del vicepresidente Rubén Arosemena. Un de los tiros alcanzó al escolta en una pierna.
Es la segunda vez en la semana que un auto del SPI recibe balazos. El 16 de diciembre, un tiro alcanzó un carro de los escoltas del Presidente Martín Torrijos cerca a la Casa de Piedra de El Chorrillo.
El propio Torrijos reconoció ayer la existencia de un grave problema de inseguridad en el país, y pidió a la ciudadanía que colabore con los estamentos de seguridad, denunciando a los delincuentes.