Cuando una persona con más de sesenta, setenta u ochenta años experimenta sensaciones extrañas (lagunas mentales, pérdidas de consciencia, confusión, ataques), es posible que achaquen estos síntomas a los problemas mentales y físicos asociados normalmente al envejecimiento.
Pero puede ser que exista otra explicación para lo que está sucediendo, la epilepsia.
Una enfermedad que afecta a gente joven. Suele comenzar en la infancia y a veces dura toda la vida.
Pero ahora sabemos que puede afectar a cualquiera y a cualquier edad.