El Gobierno de Filipinas y el Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI), el principal grupo musulmán separatista del país, anunciaron que la próxima semana volverán a la mesa de las negociaciones.
Ambas partes señalaron a través de un comunicado que "la constitución del Grupo de Contacto Internacional abre el camino, para reanudar las conversaciones de paz".