Saludos amigos y amigas del béisbol, bienvenidos a otra jornada de la pelota criolla, hoy con ustedes, para compartir el glosario del mes, el vocabulario especial, para aquellos que no creen en el desarrollo deportivo, esos mismos que estancan obras y que por razones, casi caprichosas, prefieren tener a la juventud en las calles y no en un recinto deportivo.
Repaso de fin de año escolar para que repitamos el año, especialmente en el plano ministerial.
VOCABULARIO.COM:
Estadio: Escenario deportivo, que en algunas provincias existe, en otras andan deteriorados y en Chitré, cerrado, aún sin terminar, esperando el apoyo gubernamental, para culminar la obra que los herreranos han soñado.
Ministro: Personaje político y a veces dicen que no lo son. Algunos caprichosos y otros trabajadores, pues todos no son iguales. Dícese de aquella persona que no le gusta el béisbol y mantiene en velo a toda una comunidad amante del béisbol. Poco colaboradora y con la misión de dejar cerrado el Rico Cedeño.
Béisbol: Pasión del panameño, vida y dulzura nuestra, una fiebre que nunca muere. Le gusta a todos, excepto a los ministros que no quieren meter mano en obras de desarrollo a la juventud, como el Estadio Rico Cedeño de Chitré.
Fiebre Amarilla: En este caso, derivado de una especie de humanos, amantes todos al béisbol, en especial del equipo de Herrera, de los más poderosos y populares de la liga panameña.
Rico Cedeño: Personaje ilustre de la pelota panameña, murió en el terreno, jugando el deporte que amaba; si vuelve a nacer, vuelve a morir por el béisbol, especialmente ahora que el Gobierno se burla de su nombre y mantiene paralizada la nueva obra que lleva su nombre.
Adendas: Extensión laboral de cumplimiento, elaborada por la empresa constructora y que no se quiere aprobar. Palabra poco agradable al oído de una alta autoridad educativa.
Ahora iremos a un examen, algunos pasarán sin problema y otros reprobarán en todo el sentido de la palabra. Herrera y todo el país repudia la actitud poco tolerante y de apoyo de quien ahora sabe más de ingeniería deportiva que de periodismo.
¡Viva el béisbol!
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