viernes 1 de diciembre de 2006

 

S E C C I O N E S

EPASA EN LINEA

PANAMA AMERICA

DIAaDIA EN LINEA

REVISTA SIETE!


primera plana

portada

al cierre

nacional

política

opinión

economía

el pueblo habla

provincias

deportes

el mundo

viva

sucesos


ediciones anteriores

buscador de noticias

clasificados EPASA

otros sitios de interés


  EVA



Rompiendo la tradición
Perteneciente a la etnia Emberá, Omayra se alzó de entre los hombres para convertirse en la primera mujer cacique y la voz de las mujeres de Ipetí para convertirlas en empresarias y aporte del hogar.

María del Pilar Méndez | Eva, Crítica en Línea

Imagen foto

Omaira Casamá (Fotos: Iván Uribe / EPASA)

"Yo me hice de mi propia sombra. Cuando yo salí de primaria, tenía todo el deseo de convertirme en una gran profesional y llegar a ser una buena abogada, pero nunca pude serlo. Sin embargo, Dios nos da oportunidades para todas las cosas y con el apoyo de algunas instituciones me fui capacitando y ganando conocimientos sobre el liderazgo de la mujer, derecho de la mujer indígena y discriminación femenina", comenta Omaira Casamá, quien se convirtiera en la primera mujer cacique de Ipetía, Emberá.

Omiara representa a la Asociación de Mujeres Artesanas de Ipetí Emberá, que reune mujeres que tienen el deseo de mejorar su calidad de vida a través de sus propios productos, como la cestas, trabajos en chaquiras, cocobolo, elaborados con fibras naturales.

Recientemente, Omaira tuvo la oportunidad de ser unas de las primeras en participar del porgrama de gestión "Promoviendo Mujeres Líderes para el desarrollo" de Esso Standard Oil.

LA VOZ DE SU PUEBLO
Su comunidad, mediante un consenso, la escoge como la primera mujer cacique. Semejante hecho histórico, fue motivo de reseñas y reconocimientos, como el de la entonces Embajadora de Estados Unidos, Linda Watts.

Afirma que fue una tarea fácil, "pero una se hace líder porque hay personas detrás de uno que necesitan una voz que llegue hasta las personas que puedan darles la mano".

"Cuando la mujer necesita superarse, siempre va encontrar obstáculos. Yo misma he encontrado barreras, pero eso no ha podido aminorar mis ganas de seguir hacia adelante".

En el 2000, tomó un curso de liderazgo en Israel y cuando regresa, concreta la idea que ya tenían de abrir una tienda artesanal, con el fin de recoger todas las artesanías que tenían en el lugar y ponerlas a la venta. Además, a través de un financiamiento de la universidad canadiense de McGill, lograron la construcción de la Casa Cultural, que es el escenario donde presentan su cultura, danza y comidas típicas. Además se crea un paquete turístico para dar a conocer este grupo étnico.

Omaira es una mujer incansable, y para ella nunca es tarde. Por ello, está cursando el quinto año de secundaria en la escuela nocturna.

METAS
Espera que algún día puedan convertirse en una empresa, con una tienda en Panamá y puedan mostrar sus artesanías a nivel internacional.

"Así como otros países traen sus artesanías a Panamá, nosotros también podamos vender nuestros productos en otras naciones".

Que todas las mujeres tengan un entrada de dinero fija gracias al trabajo realizado con sus manos y "que sus hijos puedan tener un futuro mejor al presente que nosotros estamos viviendo", comento está líder femenina.

EN POCAS LINEAS
Quiero transmitir el gran valor que tiene la mano de la mujer del campo y la indígena, pues nosotras nunca vamos a poder tener un ingreso fijo, un salario por los trabajos convencionales, debido a la carencia de educación, pero si tenemos los recursos para generar ingresos a través de la venta de artesanías.

Nuestra visión es que, algún día, a través de la artesanía, las mujeres puedan decir que sus hijos han logrado estudiar, gracias al trabajo hecho con sus manos y no tener que recurrir al gobierno para que nos den las cosas. La idea es trabajar y que ese trabajo sea valorado, por el estado y por la empresa privada.

La mujer indígena tiene derecho de desarrollarse y convertirse en pequeñas empresarias si así la gente nos da la oportunidad.

Considera que las necesidades de su región son: El deseo de la tenencia de tierra, mejor calidad de vida, mejor situación económica de la familia, el desarrollo de la mujer, mejoras en la salud y educación.

Desde los doce años empezó a realizar las cestas y prendas características y fue su mamá quien se le enseñó, pues es una tradición que pasa de generación en generación.



OTROS TITULARES

Consejos prácticos

 

    TITULARES

Aliados de la belleza

Imagen foto
Espíritu del adviento

Imagen foto
Mamás súper "fashion"

Imagen foto
De regreso, y muy regalada

Imagen foto
Para toda ocasión

 

linea
linea gris
 

   Copyright © 1995-2006, Crítica en Línea-EPASA 
Todos los Derechos Reservados