TEMAS DE ACTUALIDAD
¡Alguien sabe algo...! "...La conciencia que tiene precio, no es más que una mercancía...". (Canal)

Raymundo A. Moore W.
Sí... alguien sabe algo, algo muy importante que no llega al conocimiento del pueblo en general. Alguien -elevado a su máxima expresión- tiene que saber algo, porque las cosas que están dando, como se están dando, forzosamente hace que uno se torne suspicaz al respecto. Por ejemplo: -¿Por qué Elektra Noreste, S.A., "tira la piedra" del aumento en la tarifa de consumo de energía eléctrica, a partir del 1º de enero del año 2000, y ahora pretende "esconder la mano", con excusas baladíes?. -¿Por qué el Tránsito, de manera unilateral, tira un ultimátum a los dueños de automóviles, en el sentido que a partir del 1º de enero del 2000, el que no haya "sacado" un seguro obligatorio contra daños a terceros, no va a poder circular?. -¿Por qué los transportistas, "de repente", ya tienen un "análisis científico" para justiciar el pretendido alza en el pasaje (hasta por ¡cuarenta centavos!)?. -¿Por qué la gente de la "Atlantic-Pacific", ahora, y no antes, sienten que deben ir a una huelga en reclamo de sus justos derechos?. -¿Por qué tanto afán, ahora, en exigir mejoras socioeconómicas (muy merecidas), cuando éste es un problema social que no nació el 1º de septiembre del presente año, o sea que no tuvo su génesis dentro de los escasos 2 meses y medio del cambio de gobierno?. -¿A qué se debe la "racha" de tantos robos a instituciones bancarias, los secuestros, el incremento de la delincuencia y la criminalidad, etc.? Amigo lector, de repente las respuestas a todas las anteriores interrogantes son tan sencillas, que quizás no valió la pena habérsela traído a este tapete, pero me resulta demasiada coincidencia que todos estos hechos hayan comenzado a aflorar, precisamente, ¡a partir del 1º de septiembre de 1999!, como si se tratara de una muy bien planificada escalada. Entonces, frente a todos estos hechos y/o circunstancias -nada fortuitos- yo opino que, ¡Alguien sabe algo...! Algo oculto que va a ocurrir (o se está promoviendo para que ocurra), en un tiempo determinado y dentro del marco de lo que la propia Presidenta Mireya calificó como una "conspiración para desestabilizar tanto al gobierno como al país (...)", luego de lo cual, ninguna de esas ratas querrá quedarse "sin su pedazo" de ese antipatriótico queso. En su momento, el exmandatario Guillermo Endara dijo que, "...el mundo nos mira...", y hoy, esa frase cobra un significado mucho más profundo, por cuanto ahora, en estos días, y hasta la real reversión del Canal a los panameños, el mundo entero tiene los ojos puestos sobre nuestro país, sobre nuestro gobierno, y sobre el pueblo panameño en general. De hecho, la actitud cívica, madura y mesurada de la ciudadanía va a ser la carta de presentación ante el resto del hemisferio, de que, en efecto, los panameños tenemos la capacidad profesional, técnica y emocional, para encargarnos de la operación, mantenimiento y seguridad de esa importantísima ruta marítima, por lo que invito a todos los sectores a una sincera y profunda reflexión, cívica y patriótica, conscientes de que tenemos el deber, la obligación y la responsabilidad, de recibir juntos ese Canal, y entrar al nuevo siglo unidos como un pueblo cuyo nacionalismo no se dejó mezclar con falsas banderas de lucha, para ganar espacios dentro del combativo mundo de las reivindicaciones sociales, laborales y sindicales. ¡Au Revoir!
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