Se calcula que cerca de las 9:30 de la noche se dio el primer homicidio, que tuvo como escenario el callejón que se encuentra entre una iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días y la escuela primaria República de Costa Rica, en el corregimiento de Barrio Balboa, cuya víctima fue identificada como Gerardo Augusto Prias Córdoba, de 31 años.
Versiones preliminares revelan que Prias acababa de salir de su trabajo y se disponía a ir a su casa, que queda detrás de la escuela República de Costa Rica, cuando al parecer fue interceptado por sujetos desconocidos que al tratar de robarle y él oponer resistencia, le propinaron siete puñaladas.
El cuerpo de la víctima tenía una herida de cuchillo en el pecho, otra en el abdomen, dos en el costado derecho, uno en el tórax, uno en la mano y brazo derecho y en la barbilla.
En una de las heridas del costado derecho tenía clavado el puñal y a poca distancia del cadáver se encontró otro cuchillo, por lo que se presume que fueron dos personas las que cometieron el homicidio.
Según versiones obtenidas, parece que el difunto temía que le fueran a robar, debido a que en ese callejón se han cometido asaltos y violaciones, ya que en uno de los bolsillos del pantalón tenía su reloj y B/.42.00 en efectivo.
Familiares de la víctima informaron que poco minutos después de haberse dado los hechos, la esposa del occiso lo llamó por el celular y le contestó un hombre, quien le dijo "él está ocupado en estos momentos" y cuando volvió a llamar el teléfono estaba apagado.
EL OTRO MUERTO
Hora y media después de haberse registrado el asesinato de Prias, Moisés Pérez propietario de la parrillada "Monchi", ubicada en el sector de Los Guayabitos, fue informado por una persona que en la cuneta próxima a su local había un hombre tirado.
La gente que se encontraba bailando y libando en la parrillada, aseguran que no escucharon nada relacionado con el hecho. La víctima era Gabriel Armando Madrid Pecero, de 31 años, quien al momento de ser reconocido por la secretaria Maritza de Nuñez, tenía en su poder la suma de B/.14.00 , un reloj y un carnet del Supermercado "El Rey", de donde trabajaba como carnicero.
En este caso el infortunado presentaba una sola herida en la tetilla derecha, ocasionada con un puñal. En un tramo de la carretera hasta el lugar donde fue encontrada la víctima había huellas de sangre, lo que se presume que pudo haber llegado hasta el lugar en algún vehículo, ya que existe una persona que dice haber oído un carro a la hora que se dieron los hechos. Las autoridades que adelantan las investigaciones en ambos casos no descartan la posibilidad de que ambas muertes tengan relación. |