P: Da la impresión de que mi complexión muscular está descomponiéndose. Tengo la cara colorada todo el tiempo, incluso aunque no esté ruborizada o sonrojada. También me han salido hoyuelos y marcas y tengo la piel seca. ¿Qué me está pasando?
R: Parece que lo que usted tiene puede ser rosácea. La rosácea no es grave médicamente hablando, pero puede ser muy molesta y embarazosa. Es una enfermedad que avanza gradualmente y que normalmente comienza con picores y una sensación de quemazón. Después viene el enrojecimiento, en ocasiones acompañado por una ligera hinchazón de la piel. Aunque la rosácea puede afectar a cualquier parte de la cara, la nariz y las mejillas se llevan la peor parte en la mayoría de los casos.
Si no se trata, pasará a desarrollarse la fase siguiente: enrojecimiento constante en el que se hacen visibles los vasos sanguíneos. La piel se vuelve grasienta y con porosidades prominentes. A medida que pasa el tiempo, el tejido cutáneo se vuelve irregular y rugoso y aparecen granos. El actor de comedia W.C. Fields tiene rosácea y como consecuencia su nariz tiene un aspecto bulboso. La rosácea grave puede provocar inflamaciones oculares en casi la mitad de los pacientes.
El diagnóstico de la rosácea puede llegar a convertirse en algo muy difícil puesto que produce síntomas diferentes que van adquiriendo un desarrollo impredecible. Para ayudar a los médicos y a los enfermos a identificar la rosácea, un equipo de especialistas reunido por la Sociedad Nacional de la Rosácea elaboró una relación de síntomas: Consulte la lista que publicamos a continuación e intente identificar los síntomas que padece. Si tiene uno o más síntomas principales, tiene rosácea. Aunque es posible que los síntomas secundarios también se manifiesten en los enfermos de rosácea.
SÍNTOMAS PRINCIPALES
SÍNTOMAS SECUNDARIOS
Picores en la cara Ronchas rojas de gran tamaño Sequedad en la piel Hinchazón en la piel Ojos hinchados Ronchas rojizas en el resto del cuerpo Zonas insensibles en la piel
Los médicos no saben exactamente qué produce la rosácea, pero sospechan que se trata de una combinación de vasos sanguíneos extremadamente sensibles, infecciones menores e inflamación. Es una enfermedad que se contrae después de los 30 años, actualmente afecta a unos 14 millones de personas en los Estados Unidos. Las mujeres son más propensas que los hombres a padecerla, pero casi siempre es menos grave en las mujeres. Las buenas noticias son que hay varias maneras de tratarla.
Incluso la rosácea más leve debe ser tratada lo más pronto posible. Los casos que se tratan pronto suelen responder bien a los antibióticos, a pesar de que la piel tarda unos dos meses en recobrar su aspecto habitual. El tratamiento inicial normalmente consiste en una crema antibiótica que debe ser aplicada diariamente. En los casos más difíciles, los médicos a menudo recetan antibióticos orales. Si la rosácea ha afectado a sus ojos, necesita también gotas que limpien la infección ocular.
A medida que el enrojecimiento y los granos disminuyen, las venas visibles se notan aún más. La cirugía mediante láser las elimina o al menos mejora la apariencia de la cara. Eso puede conseguirse en varias sesiones que suelen durar de 15 a 30 minutos durante un período de semanas.
Si la rosácea está en una fase avanzada tal vez no responda a un tratamiento de antibióticos aunque éstos sirven aún de ayuda para paliar sus efectos. Las intervenciones quirúrgicas mediante láser son de gran ayuda para tratar los bultos y las irregularidades aparecidas en la nariz. Otras técnicas dermatológicas como la dermobrasión (que elimina la capa más superficial de la piel) también sirven para mejorar el aspecto de la piel.
En algunas personas, ciertas cosas (particularmente la luz solar, el estrés, el ejercicio físico y las comidas con especias) exacerban la dilatación y el enrojecimiento de los vasos sanguíneos. A continuación indicamos una serie de consejos para evitar estas molestias:
Protéjase la cara con crema de protección solar y cúbrase con un sombrero o una gorra. En días de mucho calor y humedad permanezca en ambientes con aire acondicionado. Procure aprender algunas técnicas para reducir el estrés como yoga o la meditación. Deje que se enfríen las bebidas calientes antes de tomárselas. Evite las salidas y los ejercicios que requieran gran esfuerzo si hace mucho calor (dentro de casa o fuera). Haga ejercicio en varias sesiones cortas en vez de en una sola y prolongada sesión. La rosácea es la causa más común del enrojecimiento facial, pero no es la única. Las reacciones a los medicamentos, especialmente las reacciones acentuadas por el sol, también provocan con frecuencia enrojecimiento facial. El tratamiento con medicamentos esteroides (con prednisone) pueden producir una combinación de acné y rosácea. En contados casos, el enrojecimiento facial crónico puede ser un síntoma de graves problemas médicos como el lupus o infecciones bacterianas de importancia.
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