CULTURA
Escritores defienden supervivencia
del libro en el próximo milenio
Madrid, octubre
EFE
El premio Nobel de Literatura
1998, el portugués José Saramago, y el novelista español
José Luis Sampedro defendieron hoy la supervivencia del libro, del
idioma y de los escritores en el próximo milenio, en un futuro acechado
por la expansión del ordenador, el inglés y el pensamiento
global.
Ambos escritores hicieron esta defensa en un diálogo que mantuvieron
esta noche en la Casa de América de Madrid bajo el título
"El idioma, el escritor y el libro, ¿tres víctimas del
próximo milenio?".
Saramago y Sampedro coincidieron en que el libro es un soporte que ha
ido cambiando de materiales a lo largo de la historia y que quizá
se transforme o se pierda en la era digital. Pero para ambos, pese a todo,
quedará el valor sentimental.
"No hay nada más entrañable que el viejo libro, el
que tiene las palabras guardadas para nosotros", señaló
el Nobel de Literatura, para destacar que "sobre la página de
un libro se puede llorar" y sobre la pantalla, "que siempre está
limpia", no.
Sampedro confesó que él siempre preferirá "la
caricia de la página" a una pantalla del ordenador, que "puede
salvar muchos árboles" y "fastidiar los derechos de autor".
Saramago señaló, por otra parte, que el problema no es
el inglés sino "el estado en que se encuentran nuestras lenguas",
con un vocabulario "cada vez más pobre" que "se acerca
peligrosamente a la onomatopeya".
"Si perdemos las palabras quizá llegaremos a perder los sentimientos",
alertó el autor de "Ensayo sobre la ceguera", quien opina
que "cada vez aprendemos mejor el idioma de otros" y olvidamos
más "el uso cabal, bonito, de nuestra lengua".
"La culpa no la tiene el inglés, la tenemos nosotros",
apostilló el escritor portugués.
En cuanto al futuro del escritor, Saramago incidió en que su destino
lo marcará "el cambio de mentalidad" del hombre, una transformación
que "ahora no sabemos adónde va".
Para Sampedro siempre habrá espacio para los escritores porque
la novela "sirve para vivir" y "siempre hay posibilidades
de reinterpretar el mundo".

|

|
Saramago y Sampedro coincidieron en que el libro es un soporte que ha
ido cambiando de materiales a lo largo de la historia y que quizá
se transforme o se pierda en la era digital. Pero para ambos, pese a todo,
quedará el valor sentimental. |

|