Los sollozos son incontenibles. Un colegio quedó de luto, dos familias lloran a sus víctimas y el gremio educativo de Veraguas se aferra al dolor y a los recuerdos.
Luis García, con 7 años de impartir educación en el colegio Inmaculada Concepción del Ingenio La Victoria, y Vielka Vanega, una veterana educadora con 22 años de servicios, fallecieron en el fatal accidente, solo a tan cinco minutos de haber abordado el bus de la muerte.
La ilusión de una mujer luchadora, coordinadora de la comisión de Bienestar Estudiantil y de Disciplina del colegio Inmaculada, no se llegó a concretar porque Vielka Vanega ya había cumplido su ciclo en la escuela de los cañaverales, y el próximo año ya había conseguido su traslado hacia el Centro Básico General José Santos Puga.
El profesor Luis García coordinaba las acciones de los estudiantes graduandos, como también a la banda de música y el grupo ecológico escolar.
Aturdidos con la noticia, los estudiantes no salían de su lamento. Un acto religioso efectuado por el sacerdote del lugar daba pie a llamar a la reflexión para que hechos de tránsito como estos no vuelvan a ocurrir.
Ambos educadores, miembros de la Asociación de Profesores de la República de Panamá y de la Asociación de Educadores Veragüenses (AEVE), están siendo enaltecidos como seres humanos que dejaron un legado y un gran ejemplo.
El profesor Alexis Tuñón, compañero de Luis y Vielka, recordó cómo los docentes no pudieron ser llevados en los automóviles de sus otros compañeros. El destino le dio una mala jugada y tuvieron que abordar el bus de la ruta Río de Jesús-Panamá para llegar a su destino, Santiago de Veraguas; solo habían pasado 5 minutos cuando dejaron de existir.
No hubo tiempo para una despedida.