Existe una ley no escrita, maldita por cierto, que asegura que un negro en los EE.UU, necesariamente tendría que contar con un 20% de puntos porcentuales a su favor en las encuestas, para pretender ganarle a cualquier blanco en una competencia por la primera magistratura. Es por eso, que también pienso, que para creer en el sueño americano hay que estar profundamente dormido. El 20% de gabela que mencionamos prevaleció en Panamá Canal Comission, a favor de los productos de la American Safety Code. Obama está 14% arriba de MacCain en todas las averiguaciones, aunque muchos estadígrafos sostienen que los cuestionarios al parecer, los han aplicando en la mayoría de los casos muy selectivamente, es decir: A "espaldas mojadas" o a "negros sangrantes".
Sí el porcentaje de Obama que lo perfila como ganador en las elecciones que se llevarán a cabo en pocos días, es producto de indagaciones realizadas en bolsones poblacionales en donde predomina lo rancio del "establishment" gringo, entonces veo a un sonriente Obama asomarse por uno de los barrotes del Palacio Oval., cosa que nos llenaría de orgullo tanto a negros hispanos como angloparlantes, pese a la diferencia de actitud entre ambos grupos, ya que los primeros logramos escaparnos hacia el monte y los otros permanecieron cual "sapos" de su imperio. Pero, si la ventaja porcentual es el resultado de aplicar el cuestionario de las preferencias en las minorías norteamericanas, con mucho dolor, tendremos a un Barak perdido y habrá surtido efecto el mote de "fundamenalista islámico" como lo caricaturizara un famoso artista de la plumilla de la opinión gráfica en los EE.UU, ilustración polémica que fue acompañada por el título "la política del miedo" y que hizo que se acabaran antes de tiempo, los ejemplares del New Yorker en todos los quioscos en donde acostumbra pasar la gente blanca y que los compraron, al ver dibujados a Obama y su esposa, como terroristas.