Expertos aseguran que el uso de e-mails o correos electrónicos, puede crear una generación de trabajadores de oficina obesos y con mala condición física.
Antes, en las oficinas, los trabajadores se veían obligados a pararse y caminar para entregar información a otros colegas en sus escritorios, pero ahora sólo basta con pulsar un botón en la computadora.
Como resultado, muchas personas no realizan el pequeño ejercicio que podrían hacer diariamente durante la jornada laboral.