La tristeza y el dolor se apoderó de los residentes de Playa El Toro y La Garita en Pedasí, después de ver cómo las autoridades destruyeron sus casas.
Al menos treinta viviendas fueron destruidas, porque los dueños de una finca aledaña alegan que esos terrenos le pertenecen, ya que poseen los títulos de propiedad.
El desalojo fue custodiado por más de cien unidades de la Policía.
Edison González, uno de los afectados, manifestó que la Alcaldía de Pedasí hace más de 25 años otorgó permisos de construcción en esas playas; pero por el valor millonario de estos lotes en la actualidad, todo cambió en beneficio de las personas adineradas y no así de la gente humilde.
Según los moradores de Pedasí, ya ninguna persona podrá visitar las playas, porque fueron cercadas.