Una bomba dejada ayer por desconocidos en el estacionamiento de un local de la Policía de Investigaciones de Chile fue desactivada a tiempo por artificieros de Carabineros .
El artefacto estaba provisto de un mecanismo de relojería y fue descubierto pasada la medianoche por un guardia del cuartel, situado en el sector céntrico de la capital chilena, quien dio la alarma. "Se trata de un niple (tubo metálico relleno con explosivo), que tenía también un sistema de seguridad y que será analizado", añadió el oficial.
"En el estacionamiento del casino de la Policía de Investigaciones había una bolsa sospechosa, en la que el guardia escuchó un sonido semejante a un tic tac", explicó a los periodistas el subprefecto de Carabineros, Sergio Uribe.