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"Ayúdeme por favor, me hirieron" fueron las últimas palabras de Nicolás Rodríguez, de 38 años, a un vecino de la Barriada el Nazareno A, luego que recibiera tres puñaladas cuando se dirigía a su residencia ubicada en el sector de Villa del Caribe, El Crisol, en Colón. La víctima era un humilde estibador de la empresa American Spowell (Novatex), quien fue acuchillado en la cabeza, espalda y brazo derecho.
El hombre se bajó del bus procedente de la ciudad de Colón y como todos los días, utilizó el camino de la barriada Nazareno para cortar distancia y llegar a su residencia, pero era vigilado por varios sujetos que lo asaltaron y mataron.
Un testigo señaló que aparentemente parecían tres menores de edad; uno de ellos tenía una gorra y esperaba impaciente una víctima. Los asesinos se llevaron la vida y los B/.100.00 que recién había cobrado Nicolás.
El hecho se registró a eso de las 9:00 de la noche en un área bastante oscura y muy distante, donde el alumbrado público es deficiente, indicaron los vecinos. David Bonilla, un lugareño, escuchó que alguien pedía auxilio y al salir de su vivienda, vio caer cerca de la casa 60 al joven que sólo dijo que lo habían herido para robarle. Inmediatamente David solicitó la ayuda a la Policía.
En el levantamiento del cadáver se observó que Nicolás en uno de los bolsillos tenía una peinilla, tres llaves y una toallita. Además, en una bolsa llevaba artículos de limpieza como jabón, pasta de diente y un desodorante.
A la hora del levantamiento del cadáver se observó que la víctima no tenía documentos de identificación. Un hecho llamó la atención de los funcionarios de la Fiscalía: al hombre le faltaba el dedo índice de la mano izquierda.
Era un joven de tez trigueña, cabello lacio negro, de aproximadamente 1.59 de altura. Vestía pantalones jeans, camisa blanca celeste a rayas, zapatos negros, pero se notaba que luchó por defenderse, por la tierra que había en su ropa.
Los moradores pidieron más seguridad y la colocación de luminarias que pueden evitar que los maleantes aprovechen la oscuridad para cometer sus fechorías. Este es el segundo asesinato que se produce en la ciudad de Colón, en las últimas 24 horas. El martes fue ultimado a tiros el asiático Lan Wan Won. Colón, con una Zona Libre, puertos y un centro de suministro de combustible, registra un desempleo superior al 20%. |