El equipo de Salud de Chiriquí mantiene un reforzamiento en el sector fronterizo panameño, a fin de evitar la propagación de la malaria, pese a que en el mes de septiembre se recibió el informe de algunos casos encontrados por el Sistema de Salud de Costa Rica, informó Pablo Acosta, director regional de Epidemiología.
Explicó que están abordando todas las medidas de seguridad para evitar un brote de malaria en Chiriquí, como la fumigación en todos los campamentos donde se alojan los indígenas, antes de que inicie la cosecha de café. Además, se han montado dos puestos de toma de muestras en Renacimiento y en el paso aduanero.
El Sistema de Salud de Costa Rica indicó la existencia de algunos casos de malaria dentro de las fincas cafetaleras del área costarricense, donde se trataba de pacientes indígena panameños. Por lo tanto, el abordaje también incluye una vacunación masiva de forma mancomunada entre las autoridades de Costa Rica y Panamá, donde se está inyectando a todas las personas que pasan por el sector fronterizo a la cosecha de café.
Acosta sostuvo que aún no se tiene ninguna enfermedad transmisible en ese sector, pero se está aprovechando la oportunidad de vacunar a una gran cantidad de personas que nunca habían bajado de las montañas, ya que se han encontrado niños a los que no se les había aplicado ningún tipo de medicamento. Añadió que esos casos no están registrados en el sistema de salud panameño, porque se encontraron en el sector Atlántico de la Comarca Ngöbe Buglé, en la provincia de Bocas del Toro. |