FAMILIA
Maltrato sexual en los niños
(Salvemos el Hogar)
Jorge M. Bruno
E ntre adolescentes y adultos,
el abuso puede causar angustia, ira, temor, vergüenza, soledad, depresión,
disfuncionalidades sexuales, conductas adictivas con el consumo de alcohol,
drogas y alimentos; conducta autodestructiva y deseos de suicidarse, impulsos
de matar al agresor, bloqueos en la memoria, rasgos de personalidad extremos,
promiscuidad sexual (especialmente en adolescentes); rebelión, desadaptación
social, disfuncionalidades parentales, pérdida de autocontrol, autoestima
muy baja, fuertes sentimientos de culpa, sentirse sucia(o) y pecador(a);
problemas en las relaciones matrimoniales, maltrato físico y psicológico
de los hijos, desprecio u odio hacia los hombres (por generalización
a partir de la figura masculina victimizadora), homosexualidad, lesbianismo
y prostitución.
En personas creyentes, el "incesto es un golpe en el mismo corazón
del plan de salvación" porque destruye la figura del Padre celestial
a partir de la desvalorización del padre terrenal, lo que le impide
al afectado elaborar una relación genuina y sin barreras con el Padre,
su Hijo, y el Espíritu Santo. Debido a que en el 65 por ciento de
los casos en que la madre descubre el incesto, ésta no intenta ayudar
ni proteger a su hija, el derrumbamiento de la familia terrenal del niño
o del adolescente le impide acceder a la familia divina o celestial. La
crisis espiritual que se desencadena es catastrófica y a veces la
víctima considera que el suicidio es la única vía de
deliberación.
¿Qué características tienen los que abusan sexualmente
de los niños? Pertenecen a todas las clases sociales. Los que proceden
de las clases profesional y alta, debido al poder económico e influencia
que poseen, hacen de sus víctimas las más vulnerables y menos
protegidas.
PREVENCION DEL ABUSO
¿Cómo se puede prevenir el abuso sexual?
1- Por medio de una educación sexual temprana y equilibrada. El
sexo debe verse como algo limpio, normal y sano, pero para practicarse exclusivamente
entre adultos dentro del matrimonio.
2- La educación sexual temprana (desde alrededor de los 3 años)
debe incluir la enseñanza de prohibiciones respecto a que alguien
toque determinadas partes del cuerpo o se presente desnudo ante el niño.
3- Todos los miembros de la familia deben protegerse unos a otros, evitando
cercanías físicas íntimas o permanecer solos por mucho
tiempo.
4- Los padres, especialmente las madres, deben crear una relación
de total confianza con sus hijos e hijas, enseñándoles a venir
a ellos y decirles "todo" lo que les ocurre, sin temer las consecuencias
de amenazas o chantajes.
5- Crea lo que le dice su hijo o hija, a no ser que se pruebe lo contrario.
En la mayoría de los casos, dice la verdad.
6- Si descubre algo extraño o anormal en la conducta de alguno
de sus hijos, extreme las medidas de protección del menor.
7- Si descubre el abuso, debe denunciarlo inmediatamente, aunque eso
signifique la cárcel, el divorcio o la separación de su pareja;
de lo contrario, el que encubre el abuso es tan culpable como el que lo
hace.


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