La isla china de Hainan sufrió hoy el pleno impacto del tifón "Damrey", que llegó a su costa de madrugada con lluvias torrenciales y los vientos más fuertes de los últimos 30 años, que han causado dos muertos, informó el ministerio de Asuntos Civiles.
El tifón alcanzó la costa oriental de Hainan a las 4.00 hora local de hoy (20.00 GMT del domingo) con vientos de hasta 55 metros por segundo en el ojo de la tormenta.
Las fallecidas son dos mujeres de 42 y 62 años, que quedaron sepultadas al hundirse parte de sus viviendas por el vendaval, que barrió toda la isla del este al oeste.
"Nuestra mayor preocupación ahora es el fuerte viento", reconoció un funcionario del Centro de Control y Prevención de Inundaciones en Hainan, que no pudo dar cifras de desaparecidos ni daños materiales.
Un total de 170.000 personas fueron evacuadas en previsión de la avalancha de agua, que provocó el corte de electricidad en casi la totalidad de la isla tropical.
El Aeropuerto de Haikou, la capital, tuvo que suspender la salida de 67 vuelos, mientras otros 13 procedentes de distintas ciudades del país no pudieron llegar a la isla, donde numerosos turistas se encuentran atrapados.
"Algunos turistas que habían reservado habitaciones no han podido llegar por el mal tiempo y los que ya están dentro no pueden marcharse", declaró a la prensa Melody Xu, del "Hotel Sheraton" en la playa de Sanya.
No sólo la industria turística se ha visto afectada por la tormenta, también los daños podrían ser considerables en las plantaciones de arroz, caucho y plátano, según los expertos citados por el rotativo "China Daily".