Un grupo de peligrosos elementos continuan prófugos de las autoridades, sin que hasta el momento se vislumbre su pronta captura por parte de los diversos estamentos de seguiridad.
Uno de ellos es el reconocido narco beliceño Fernando Requena Duval, quien en un abrir y cerrar de ojos logró evadirse de agentes de la PTJ; quienes lo tenían bajo su custodia.
Esta inesperada fuga del sector Requena ocurrió el 19 de enero de 2004 en los precisos instantes en que supuestamente iba a recibir atención médica en el histórico nosocomio.
Por el momento hay algo bien concreto respecto al casi del escurridizo Requena, es que nadie sabe donde está su paradero, es como si la tierra se lo hubiera tragado.
En este caso fueron investigados varios agentes de la PTJ, y para colmo la Honorable Corte Suprema declaró ilegal el arresto de unos de los custodios, de quien se sospechaba había recibido dinero a cambio de "dejar partir a este señor" cuyo paradero se desconoce pero que las cárceles panameñas reclamam lo más pronto posible.
Otro que se lo tragó la tierra es al señor Rafael "Rafito"Cedeño, ex funcionario del tenebroso agente del G-2 norieguista.
De acuerdo a fuentes confiables, Cedeño, quien enfrentaba delitos contra el patrimonio fue sacado del país por agentes de la inteligencia norteamericana dados los nexos que tenía este sujeto con la temible y conspirativa CIA.
La salida de Rafael "Rafito" Cedeño coincidió con el arresto del Coronel Marco Pedro Justine Fernández, colaborador del ahora derrocado General Manuel Antonio Noriega, otro agentes de la CIA quien en poco tiempo recuperara su libertad.
MOLESTIA: DESAPARECIDOS
Desde hace varios años, la llamada justicia panameña ha sido objeto de burla por parte de elementos protegidos por individuos poderosos, quienes logran hacer de las suyas en un ambiente cada día más propenso al tráfico de influencias y corruptelas.