La Unidad de Policía Ciclística de la Zona de Veraguas se entrena continuamente para mantener las condiciones físicas óptimas que le exige la institución y para poder aprobar la clasificación de ascensos de los agentes de cada año.
En ese mismo sentido, sus componentes se actualizan en temas relacionados a las funciones policiales y en otros de interés profesional, que ayudan en el trabajo diario de estos agentes del orden público.
Algunos miembros de la Policía de ciclismo también acuden -en su tiempo libre- a las universidades, a fin de convertirse en profesionales, lo que hace el manejo institucional más beneficioso para la comunidad.
Trabajan en horarios de siete de la mañana hasta las seis de la tarde sin reposo, y lo hacen hasta esa hora porque en las noches es peligroso, ya que las bicicletas no tienen luces apropiadas para que puedan ser vistas por los conductores, y se abstienen de realizar el servicio para evitar accidentes de tránsito.
Aún así, la vigilancia en las calles -por parte de esta sección- sigue siendo efectiva, por la cantidad de personas involucradas en la comisión de delitos que han sido arrestados y puestos a órdenes de las autoridades competentes.
La efectividad de los agentes policiales muchas veces se debe a la cooperación de los buenos ciudadanos, que hacen las denuncias -de manera correcta y a tiempo- de los hechos que suceden en contra de otros que luchan honradamente.
Llegan de manera silenciosa al lugar y a veces sorprenden a los delincuentes en plena acción.