La primera etapa de las elecciones para una nueva asamblea estatal en la Cachemira india culminó ayer, con el telón de fondo de la violencia y a la sombra de una tensa confrontación entre las potencias nucleares India y Pakistán.
Las fuerzas indias de seguridad dijeron que mataron a 17 militantes radicales que trataron de ingresar al territorio indio desde Pakistán. Sin embargo, a pesar de la violencia, las autoridades informaron que alrededor de 25 por ciento del electorado había votado para mediados de la tarde.
Ocho supuestos guerrilleros murieron en dos operaciones el lunes en las áreas de Surankote y Keran, cerca de la llamada Línea de Control que divide al territorio cachemiro entre la India y Pakistán.
Decenas de policías paramilitares con chalecos antibalas y armas automáticas custodiaron los colegios electorales en el primero de cuatro días de votación programados hasta el 8 de octubre en la disputada región del Himalaya, que mantiene enfrentados a la India y Pakistán en una amplia movilización militar.
Los votantes fueron registrados antes de entrar en los colegios electorales en una fría mañana otoñal en el único estado indio de mayoría musulmana, donde más de 440 personas murieron durante una sangrienta campaña electoral. |