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El Congreso de Estados Unidos, regresando a su sede del siglo XVIII para conmemorar una tragedia del siglo XXI, hará hoy viernes un viaje extraordinario a Nueva York, a fin de conmemorar los ataques del 11 de septiembre.
Al salir de Washington, por apenas la segunda vez en más de 200 años, los legisladores se reunirán en el Salón Federal de Nueva York, en el Bajo Manhattan, a pocas cuadras del lugar de los ataques contra el World Trade Center, en los que murieron 3.000 personas.
Será una sesión simbólica: ningún proyecto de ley será aprobado, ni se decidirán temas nacionales. Pero varios dirigentes de los partidos Republicano y Demócrata dicen que no se debe subestimar el valor del simbolismo. De acuerdo con el historiador asociado del Senado, Don Ritchie, la única vez que el Congreso salió de Washington desde 1800 fue a Filadelfia, en 1987. |
