Con el compromiso de "acabar con el paveo legislativo y seguir dándole continuidad de los procesos de debate continuo con transparencia y participación ciudadana de las leyes", Rubén Arosemena asumió ayer formalmente la administración de este Organo de los Estado de manos del presidente saliente Laurentino Cortizo Cohen.
Descartó cualquier intención de despidos políticos a lo interno de la Asamblea, pero aseguró que el personal de confianza de la presidencia será el único que será reemplazado.
Aseguró que durante este periodo se publicarán semanalmente la lista de asistencia de los legisladores para que la ciudadanía los señale y los juzgue. Sostuvo que entre los planes que pretende implementar la nueva directiva de la Asamblea Legislativa está la ejecución del programa de votación computarizada, cuyo costo de inversión asciende a más de 125 millones de dólares y el cual está financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo. |