Salvador Rodríguez, el último ministro de Educación de la anterior administración, dijo sentirse tranquilo en su condición de investigado por el presunto peculado del escándalo de los contratos irregulares para la remoción de la fibra de vidrio en centros escolares de Colón. Rodríguez aseguró que no hay nada que implique un peculado en las contrataciones.
"Fueron cuestiones de procedimiento y se efectuaron los refrendos de la Contraloría General de la República", expresó el ex ministro Rodríguez en una entrevista con Crítica.
Rodríguez quien dijo estar dispuesto a comparecer mañana martes a la Fiscalía Tercera Anticorrupción a realizar sus descargos por el presunto delito de peculado, tras firmar una Addenda del contrato 017-2008 por 119, 496 dólares, sostuvo que si hubiese algo irregular, la Contraloría lo hubiese echado para atrás.
El ex titular de Educación explicó que al tomar el cargo en mayo de 2008, la Contraloría de la República le retornó la Addenda 1 que ya había sido enviada por su antecesor Belgis Castro para el refrendo y la cual firmó.
Crítica tuvo acceso al Informe de Auditoría de la Contraloría General de la República y se pudo constatar en la foja 101 de la auditoría, que el ex ministro Belgis Castro le envió una nota al ex ministro de Economía y Finanzas, Héctor Alexander para hacer la Addenda.
En la foja 114 del mismo expediente aparece el acta de entrega de trabajos y obras finalizadas, donde están estampadas las firmas del fiscalizador e inspector de la Contraloría en Colón, Francisco De La Cruz; del representante de la empresa contratista CODEISA, Luis Sempero; del director Regional de Ingeniería y Arquitectura de Colón, Augusto Peñafiel Herrera; de Glenis García, jefa de Inspección Nacional de Ingeniería y Arquitectura del Ministerio de Educación y Cecilio Victor Cobham, director Regional de Educación de Colón.
Estas personas citadas dieron fe que los trabajos de remoción de fibra de vidrio se habrían realizado, pero se establecía que el alcance de los trabajos ascendían a 119, 496 dólares ya que se confirmó que los trabajos se realizaron en 4,979 metros cuadrados adicionales y no a lo establecido en el contrato original que era de 90 metros.
Al respecto, Rodríguez aclaró que el firmó la Addenda que se le atribuye en esta investigación, al contar el documento con las firmas de todos los funcionarios que habían aprobado la misma durante el período de su antecesor Belgis Castro y que ya estaba en la Contraloría, la cual posteriormente fue refrendada.
Rodríguez sostuvo que "lo que está pasando es que tienen que agarrar y distraer la atención de la población panameña por las promesas realizadas".
La Fiscalía Tercera Anticorrupción en este caso ordenó las indagatorias de los ex ministros, Castro, Rodríguez, como de Augusto Peñafiel Herrera (ex inspector de Obras de la Dirección Regional de Educación de Colón; César Cordero (ex director Nacional de Ingeniería y Arquitectura del MEDUCA) y Glenis García (jefa de Inspección).
Entre los centros educativos donde se detectaron las anomalías se encuentran: Escuela Desmont Bryant, Escuela Felipe Salas Barría, Escuela Jiménez, Escuela Marcos Vásquez y la Escuela Las Cruces.