Atender un caso de violencia doméstica se convirtió en una verdadera odisea para varias unidades policiales la noche del miércoles.
Todo se debió a que varios moradores de los edificios conocidos como Los Abanicos, en Villa Guadalupe, en el distrito de San Miguelito, les cayeron a las unidades del orden público a punta de piedras y botellas.
Eso porque querían evitar a como fuera, que se llevaran a uno de los vecinos acusado de supuesto maltrato intrafamiliar.
Una teniente que acompañó a las unidades del orden público fue la que se llevó la peor parte en esta historia, pues el acusado de maltrato la mordió y le provocó algunas fracturas.