La esposa coreana del obispo africano Emmanuel Milingo, María Sung, aseguró ayer que está "dispuesta a ayunar hasta la muerte" si no se le permite encontrarse con su marido. "Dios no quiera -señaló- que mi vida acabe en drama. Estoy dispuesta a morir y a sacrificarme para defender la dignidad de un matrimonio celebrado libremente".
La médico coreana, que realiza una huelga de hambre desde el pasado día 14, lamentó no haber recibido respuesta de las dos cartas que ha enviado al Santo Padre pidiendo un encuentro privado con el prelado. Esta reunión todavía no ha tenido lugar a pesar de haber sido aprobada por la jerarquía eclesiástica. En un nuevo llamamiento al Papa, María Sung pidió que se respeten sus derechos "de mujer y esposa". |